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Transformación Digital en el Perú: una visión al 2024

UTP Editor 30 enero, 2024

El mundo ha cambiado de forma inevitable durante los últimos años. Aspectos como el teletrabajo, la educación virtual y las compras online en el Perú no eran tan frecuentes hasta hace 3 años atrás; sin embargo, la suma de tecnologías emergentes y el contexto que atravesamos, dieron paso a la transformación digital en las empresas y en las personas.

Para Manuel Velarde, Director de la nueva Maestría en Gerencia de TI y Transformación Digital de la Escuela de Postgrado UTP, existe un creciente compromiso y esfuerzo por la innovación y transformación digital en todos los ámbitos, pero es un camino complejo de recorrer ya que implica un cambio de mentalidad en todos los aspectos del negocio.

Manuel Velarde define la transformación digital como una forma de volver a pensar la empresa, centrándose en la satisfacción del cliente. Este proceso, el cual no es inmediato, cuando logra aplicarse de forma correcta, crea un valor inigualable tanto para los clientes como para los colaboradores y la sociedad en general.

En este proceso, se usa de forma intensiva las tecnologías, la sistematización y el análisis de datos para impactar en las personas, es decir, logra mejorar productos, servicios y modelos de negocio que generan un efecto positivo a nivel económico para las organizaciones.

La Transformación Digital en Perú

El Director de la nueva Maestría de Postgrado UTP, quien también es líder de Innovación y Transformación Digital en Caja Sullana, señala que en un estudio realizado por la consultora RTM, a más de 400 empresas, el 93 % de ellas señalaron que la transformación digital es clave para el crecimiento; sin embargo, solo el 13 % siente satisfacción ante el avance obtenido.

Lo anterior se debe a los desafíos actuales que desaceleran los procesos de transformación. Entre ellos:

La resistencia al cambio: el rechazo y desconfianza que pueden sentir las personas y organizaciones frente al desarrollo tecnológico con herramientas como la inteligencia artificial, el uso de big data, machine learning y más.
La falta de talento: la carencia de profesionales que cuenten con las habilidades necesarias para desarrollar e implementar soluciones digitales.
El acceso a las tecnologías: bien sea por falta de infraestructura, baja inversión en investigación y desarrollo.

Según EY, a nivel regional, América Latina se encuentra encaminada al desarrollo tecnológico y sus organizaciones cuentan con la capacidad de adaptarse a un entorno digital; sin embargo, existe una falta de estrategias de mejora para que la introducción a las nuevas tecnologías sea uniforme.

En ese sentido, según el IMD, Perú se encuentra en el cuarto lugar de la región con respecto al nivel de competitividad digital, destacando en tres principales categorías: conocimiento, tecnología y preparación para el futuro.

Al respecto, este último punto significa una gran oportunidad para que las organizaciones inicien su proceso hacia la transformación digital. Para ello, se requieren profesionales altamente capacitados en el sector tecnológico y que contribuyan a generar valor en sus organizaciones con innovación y liderazgo, aspectos que pueden desarrollarse en la Maestría en Gerencia de TI y Transformación de Postgrado UTP. ¡Transforma tu futuro hoy!

Administración 6 Mins Read

Mentalidad de crecimiento en acción: cómo es

UTP Editor 14 diciembre, 2023

La mentalidad de crecimiento es un término que se ha hecho cada vez más frecuente. La autora, psicóloga y catedrática de la Universidad Stanford, Carol Dweck, la ha definido en sus diversas publicaciones y conferencias como la mentalidad de aquellos que creen que las habilidades más básicas pueden mejorarse.

¿En qué consiste el mindset y cuál es su impacto en la vida de las personas? Este es un pilar básico para sacar adelante los proyectos, en cualquier área.

En su podcast, Lilipodcast, la directora de la Escuela de Postgrado de la UTP, Liliana Alvarado, define la mentalidad como las creencias, percepciones y maneras de enfrentar los miedos y los desafíos. Podemos identificar la mentalidad que estamos teniendo en el esfuerzo que ponemos para superar los retos, en nuestra actitud hacia ellos.

Gracias a nuestra plasticidad cerebral y capacidad de aprendizaje, la mentalidad no es inalterable. Podemos transformarla con acciones y salir de la zona de confort para alcanzar el máximo potencial aunque, con total seguridad, nos equivoquemos en el proceso.

¿Qué es la mentalidad de crecimiento?

Las personas con un mindset enfocado a crecer son aquellas que toman riesgos y encuentran oportunidades para desarrollar sus atributos de forma continua. Por otro lado, las personas con mentalidad fija son las que consideran su personalidad, habilidades e inteligencia como estáticas o imposibles de modificar.

Una persona con mentalidad fija es adversa a los riesgos, no abandona la zona de comodidad porque tiene mucho miedo al fracaso. Es alguien proclive a pensar de forma negativa, con pensamientos como “No puedo”, “No soy suficiente”, “No daré la talla”, “Es demasiado riesgo”o “No tengo que hacerlo”.

Si bien las personas con mentalidad de crecimiento sienten miedo e incertidumbre, son más perseverantes pues accionan para el desarrollo de sus habilidades. Un ejemplo de persona con este mindset es Michael Jordan, quien escuchó de un entrenador que no sería jugador profesional porque no era bueno.

Salir de la zona de confort: identificando la mentalidad

La mejor forma de fomentar una mentalidad de crecimiento y apostar por su desarrollo consiste en la autoconciencia. Identificar y comprender cuál es la forma de pensar, cuáles son los comportamientos ante los desafíos y reconocer cuando se tiene una mentalidad fija.

Una persona con mentalidad de crecimiento comprende que no existe una única oportunidad para todo y que no se logra el éxito a la primera y de manera perfecta. Por el contrario, valora el cambio y la adaptación como herramientas para alcanzar sus metas. Esta persona gestiona el miedo para cruzar los puentes que no permiten expandir su mentalidad.

A diferencia de una persona con mentalidad fija, abraza el proceso de autodescubrimiento, el aprendizaje permanente y la imprevisibilidad. No obstante, no lo hace a ciegas ya que adapta su mindset al aprendizaje continuo y a desarrollar la resiliencia para afrontar las circunstancias.

¿Cómo entrenar la mentalidad de crecimiento?

Salir de la zona de confort es el primer paso para el desarrollo personal. Como señala Liliana Alvarado: la mente se educa, se transforma y se alcanza con ella nuevos territorios. Para ello debes:

Aceptar los desafíos

Los retos son oportunidades para aprender y crecer, son ocasiones que llevan a la superación. Desarrollar la capacidad de resolver problemas, ajustarse al contexto de forma positiva y tomar decisiones de manera estratégica, es el resultado de sumergirse en retos.

El esfuerzo lleva al progreso

Ser perseverante, esforzarse y trabajar duro lleva a resultados exitosos. El camino hacia la mejora está lleno de fracasos, sin embargo, mientras exista pasión, curiosidad y compromiso se puede alcanzar lo deseado.

En la mentalidad de crecimiento los elogios basados en el esfuerzo tienen mejor resultado en el desempeño posterior. Estos elogios, por ejemplo, validan la constancia y la superación de obstáculos.

Mirar al fracaso y abrazarlo

La equivocación no es el final de un camino, es un trampolín hacia otras etapas más plenas. Observar el fracaso como una oportunidad valiosa de aprendizaje caracteriza a una persona con mentalidad de crecimiento.

La experiencia del fracaso nos brinda conocimientos valiosos y cada error representa una oportunidad de aprendizaje. Aquellos con una mentalidad fija ven el error como el final de su camino, en lugar de percibirlo como un escalón para continuar avanzando.

Aceptar comentarios constructivos con atención

El feedback es siempre un regalo, una forma de mejorar y crecer. Escuchar con atención, valorar las palabras y usarlas para cambiar de forma positiva es una manera de alimentar la mentalidad de crecimiento.

Celebrar el éxito de los otros

Estar genuinamente feliz por los demás, verlos como fuentes de inspiración y disfrutar de su momento es parte del desarrollo personal. Rodearse de personas que quieran impactar en el mundo de manera positiva es también una manera de desarrollar el mindset de crecimiento.

Según Liliana Alvarado, directora y docente, la vida no se define por cómo la describimos, sino por cómo la percibimos. La sensación de estar en el camino correcto, de cometer errores y aprender de ellos, renueva nuestra mente e inspira a esforzarnos más y mejorar continuamente.

La mentalidad es maleable e incluso puede cambiar según las circunstancias, con determinación y esfuerzo se pueden alcanzar grandes hitos. Rodéate de gente con este mindset en el MBA de la Escuela de Postgrado de la UTP, donde el objetivo es que seas un agente del cambio en la sociedad.

Preguntas Frecuentes

¿Qué es la mentalidad de crecimiento y cuál es su impacto en la vida de las personas?

La mentalidad de crecimiento se refiere a la creencia en la mejora constante de habilidades básicas, lo que impulsa a las personas a tomar riesgos y encontrar oportunidades de desarrollo continuo.

¿Cuál es la diferencia entre una persona con mentalidad de crecimiento y una con mentalidad fija?

Quienes tienen mentalidad de crecimiento ven los desafíos como oportunidades de aprendizaje y se esfuerzan por mejorar, mientras que los de mentalidad fija tienden a evitar riesgos por miedo al fracaso y creen que sus habilidades son estáticas.

¿Cómo se puede entrenar la mentalidad de crecimiento?

Se puede entrenar aceptando desafíos, esforzándose, mirando al fracaso como una oportunidad de aprendizaje, aceptando feedback constructivo y celebrando el éxito de los demás, entre otros aspectos mencionados en el texto.

Marketing 5 Mins Read

Neuromarketing: desentrañando el cerebro

UTP Editor 13 diciembre, 2023

El propósito del neuromarketing es analizar y comprender los mecanismos detrás de las decisiones de compra. Toma ventaja del comportamiento y las preferencias del consumidor para adaptar productos, servicios y campañas, buscando crear resonancia emocional. Pero, ¿cómo funciona?

Liliana Alvarado, docente de la Escuela de Postgrado de la UTP y autora del libro Brainketing: el marketing es sencillo, en su programa Lilipodcast, reflexiona sobre cómo las experiencias sensoriales pueden generar acciones de adquisición, de convencimiento en torno a una marca. Al comprender cómo funciona el cerebro se pueden usar campañas de marketing más acertadas.

Neuromarketing: claves para una estrategia ganadora

Este tipo de marketing permite comprender los impulsos inconscientes detrás de las elecciones de los consumidores. Es un área multidisciplinar que implica neurociencias, marketing y psicología.

Su objetivo es explorar, comprender, analizar y predecir los comportamientos de compra. En este tipo de decisiones los estímulos, incluso los más sutiles, son cruciales. Las emociones, conscientes e inconscientes, afectan la experiencia.

El neuromarketing examina la influencia de las emociones, la intuición y la mente inconsciente a través de estudios en el cerebro. En estos análisis se observan las respuestas neuronales del consumidor ante diferentes escenarios, para ello se usan pruebas como:

Electroencefalograma.
Imágenes por resonancia magnética funcional (fMRI).
Seguimiento ocular.
Codificación facial.
Mediciones biométricas.

Cada una de las herramientas contribuye a tener datos que puedan mejorar la experiencia del usuario. Usando neuromarketing se puede medir la efectividad de una publicidad, el atractivo de un producto, el valor percibido y el precio, creando estrategias que impacten.

Marketing sensorial: haciendo uso de las investigaciones científicas

Una vez que se tienen datos del cerebro del consumidor, se pueden aplicar técnicas de marketing que conecten al usuario con las marcas a través de sus sentidos (marketing sensorial). Estas técnicas se centran en las percepciones y estímulos del consumidor con la idea de disponerlos para la compra.

Señala la Directora de la Escuela de Postgrado de la UTP, Liliana Alvarado, que se apelan a las emociones para generar la venta, para seducir al público. Un ejemplo de ello ocurre en una panadería/pastelería: el olor de los productos recién horneados puede trasladar a la infancia, a momentos alegres, recreando esa sensación en el comprador.

El marketing sensorial llevado al olfato produce respuestas fisiológicas (la salivación), valorativas (porque el olor se asocia a algo positivo) y de consumo: caer en la tentación. Si se acompaña con marketing visual, donde la estética también proporciona sensaciones agradables, la venta está garantizada.

Es ideal usar marketing sensorial (tanto en el mundo offline como online), puesto que busca establecer una experiencia única, centrada en la vida del usuario, en sus recuerdos, emociones o imaginación. Este tipo de estrategias humaniza a la marca, le otorga valoración positiva al producto y aumenta la lealtad del cliente.

Un ejemplo de marketing sensorial y de neuromarketing es el uso de emoticones en las facturas de electricidad. Las empresas usan una carita feliz o una carita triste para dar indicaciones a sus usuarios; estos, al encontrarse al día y recibir un emoticón feliz tienen una sensación de recompensa y puede generar, incluso, motivación nueva: pagar a tiempo la factura.

El marketing orientado a los sentidos puede usarse también en entornos digitales, a través de cambios sutiles como el color de un enlace, el diseño de un sitio web, la disposición de un texto en una publicación o los botones de call to action. Lo fundamental es saber qué puede hacer que tu consumidor tome acción y guiarlo hacia ella.

Publicidad con neuromarketing: algunas recomendaciones

Los conocimientos generados por el neuromarketing buscan crear respuestas emocionales positivas que incidan en la decisión de compra. La conexión emocional genera compromiso, confianza y una ventaja competitiva ante otras marcas.

Al usar publicidad con esta técnica es importante:

Comprender a la audiencia: las herramientas de neuromarketing otorgan información sobre preferencias, comportamientos y emociones. Esta información se debe usar de forma responsable para generar experiencias gratas e inolvidables.
Centrarse en las emociones: ¿Cómo se sienten los consumidores? ¿Qué genera usar el producto o servicio? ¿Cómo incide la marca en su vida? Fomentar esa conexión en cada comunicación generará efectividad en la campaña.
Pensar en el diseño y en el canal: optimizar los empaques de los productos, el diseño y las campañas para generar las sensaciones que se aspiran, produciendo mayor número de impresiones.

Al utilizar publicidad con neuromarketing es muy importante ser ético y transparente. Las investigaciones deben tener consentimiento y no se puede usar este tipo de marketing para manipular a las personas.

Debido a que estamos en constante innovación científica y tecnológica, el potencial del neuromarketing crece, desempeñando un papel relevante para las organizaciones y su entendimiento sobre los consumidores. Usar estrategias basadas en estos datos pueden crear experiencias positivas a largo plazo e impulsar la repetición de compra.

Si quieres saber más sobre esta y otras áreas del marketing actual, inscríbete en la Maestría en Marketing y Gestión Comercial de la UTP, donde aplicamos la neurociencia al marketing, la dirección estratégica y nos enfocamos en el consumidor y en técnicas ganadoras para generar valor y diferenciación.

Educación 7 Mins Read

Habilidades blandas en la educación

UTP Editor 13 diciembre, 2023

La labor del docente tiene una relevancia sin igual. Su papel no es solo transmitir conocimientos, sino transmitir a sus estudiantes habilidades blandas y duras para el desempeño académico y profesional. ¿Cuáles deben ser las características de un buen docente en la actualidad?

El rol del docente ya no es solo ser un vínculo de saberes: debe brindar experiencias, aprendizajes más significativos desde el hacer. Esto implica mejorar sus habilidades, herramientas y estrategias para brindar procesos de enseñanza y aprendizaje de vanguardia.

Marlith Segura Castillo, docente de la maestría de la Escuela de Postgrado UTP, señala que los docentes son productores de conocimiento, guías que también están en constante aprendizaje.

Los estudiantes son los protagonistas del acto educativo, por ende, la enseñanza está más orientada al uno a uno, lo que se hace necesario manejar tanto habilidades técnicas como las relacionadas al desarrollo socioemocional.

Características de un buen docente: ¿qué hace la diferencia?

Según la experiencia de la docente Segura Castillo, el docente universitario actual entra a las aulas para compartir con alumnos multidisciplinarios, de diferentes generaciones y con expectativas diversas. Esto hace que se eleve el nivel de responsabilidad y que se busque aplicar metodologías y herramientas más personalizadas, orientadas a generar una conexión sin perder de vista el acto educativo.

Los docentes, indica la también consultora asociada de negocios y emprendimientos, deben conocer a sus estudiantes para afinar sus estrategias de enseñanza. Para ello es necesario contar con habilidades blandas y ser líder pedagógico para potenciar talentos.

Entre las características que puede desarrollar para impulsar los procesos de aprendizaje se encuentran:

Conocimiento actualizado

Un buen docente debe tener conocimientos avanzados en su área, conocer la información más novedosa y dosificarla para su grupo. Asimismo, es necesario que se reconozca y actúe como un eterno aprendiz, es decir, que pueda aprender, enseñar, volver a aprender, enseñar y así, de forma cíclica, apostando por la mejora continua.

Empatía

La empatía es una de las habilidades blandas más importantes en la educación. Un docente empático comprende las preocupaciones y alegrías de sus estudiantes. Esto permite construir una relación sólida y positiva, donde el alumno se siente apoyado y valorado. La empatía no solo se refleja en el aula, sino que también construye relaciones sólidas y duraderas.

Comunicación asertiva y efectiva

Las habilidades blandas en educación son esenciales para comunicar los diversos conocimientos, instrucciones y experiencias. El docente es un mediador: observa con atención y paciencia para luego gestionar las situaciones, responder preguntas y brindar feedback. A través de la escucha y la observación atenta puede llevar al máximo el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Adaptación y flexibilidad

El docente es un estratega: entra al aula con un plan, pero tiene la capacidad de adaptarlo sobre la marcha y ajustar su estilo de enseñanza para lograr alcanzar a más estudiantes. Toma en consideración las nuevas situaciones y necesidades para adaptar la metodología e innovar en técnicas y estrategias.

100 % pasión por la enseñanza

Un líder pedagógico se caracteriza por su compromiso y su pasión hacia su labor. Este identifica su propósito y toma acción generando respuestas positivas en sus estudiantes.

Habilidades blandas en la educación: ¿por qué son tan importantes?

Las habilidades blandas o soft skills se pueden entrenar, desarrollar. Son atributos que permiten formar para la vida, es decir, que pueden incrementar el potencial interno y ayudar a otros a crecer.

El autoconocimiento, como bien indica la docente de UTP Marlith Segura Castillo, contribuye al desarrollo de estas habilidades. En el entorno educativo estas son algunas de las más importantes:

Liderazgo

Entre las habilidades de un docente debe encontrarse ser líder. Aquel que guía a sus estudiantes hacia sus talentos, con sabiduría y respeto, y contribuye a que sean agentes de cambio.

Creatividad

Las estrategias pedagógicas y mantener la atención de los estudiantes requiere ingenio. En el caso de los docentes aplicar metodologías activas y de innovación hará que sus estudiantes también sean multiplicadores de los mensajes y desarrollen ambientes educativos dinámicos.

Resolución de problemas

Identificar y gestionar las adversidades dentro y fuera del aula permitirá crear procesos eficientes, positivos y tomar decisiones efectivas. Esta habilidad de un docente también se transfiere a sus estudiantes cuando estos participan de forma activa en la construcción de sus aprendizajes.

Inteligencia emocional

La capacidad de reconocer, comprender y gestionar las emociones es necesaria dentro del entorno educativo. Facilita la gestión de conflictos y fomenta ambientes de aprendizaje positivos, donde el estudiante se sienta seguro.

Usar nuestras emociones puede motivarnos y motivar a los demás, así como llevarnos a reflexionar para establecer relaciones positivas en todos los contextos.

Habilidades blandas en la educación: enfrentar retos del siglo XXI

Las características de un buen docente le permiten adaptarse a los diferentes cambios en los procesos educativos. Si bien vivimos en un mundo hiperconectado, cargado de sobreinformación, el docente debe usar sus habilidades para afrontar desafíos como:

Desarrollo tecnológico: la actualización implica cambiar los escenarios y gestionarlos para adecuarlos a los estudiantes. Formarse para hacer buen uso de las tecnologías y ayudar a los estudiantes a que también se relacionen con ellas de manera activa y segura.
Diversidad cultural: en la era de la globalización los estudiantes vienen de distintas culturas y contextos sociales, por ello, los docentes deben hacer uso de su empatía, comunicación y flexibilidad para brindar espacios de aprendizaje y educación de calidad.
Inclusión real: más que hacer uso de políticas inclusivas, es labor del docente fomentar las mismas oportunidades para todos sus estudiantes. Este es un proceso de mejora continua que implica darle valor al otro, una valoración centrada en la escucha y la participación activa.

Ser docente en el mundo actual es una oportunidad para crecer junto a los estudiantes, estimular su aprendizaje y contagiar la pasión por la enseñanza. La Maestría en Docencia Universitaria y Educativa de la UTP se enfoca en el desarrollo de habilidades blandas, preparando a los docentes, a través de metodologías innovadoras, para marcar la diferencia en la vida de sus alumnos.

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Preguntas Frecuentes

¿Cuál es la importancia de las habilidades blandas en la educación?
Las habilidades blandas son fundamentales en la educación porque no solo se trata de transmitir conocimientos, sino de formar personas completas capaces de enfrentar los desafíos del mundo actual. Estas habilidades, como la empatía, la comunicación efectiva y la adaptabilidad, son cruciales para el desarrollo personal y profesional de los estudiantes.

¿Cómo puede un docente mejorar sus habilidades blandas?
Un docente puede mejorar sus habilidades blandas a través de la práctica consciente y el desarrollo personal. Esto implica trabajar en áreas como la empatía, la comunicación asertiva, el liderazgo y la inteligencia emocional. Además, buscar formación continua y estar abierto a recibir retroalimentación son pasos clave para fortalecer estas habilidades.

¿Por qué es importante la inclusión en la educación y cómo pueden los docentes fomentarla?
La inclusión en la educación es crucial para garantizar que todos los estudiantes tengan igualdad de oportunidades de aprendizaje. Los docentes pueden fomentar la inclusión creando un ambiente acogedor y respetuoso, adaptando sus métodos de enseñanza para atender las necesidades individuales de cada estudiante y promoviendo la participación activa de todos en el aula. Además, es importante sensibilizar a los estudiantes sobre la diversidad y fomentar el respeto hacia las diferencias.